La Historia de Karen

Por Luis Eduardo Arriola Meneses. 10 de diciembre del 2012.

Advertencia: El siguiente caso está basado en sucesos reales. Los nombres fueron cambiados para proteger la identidad de las personas. El propósito es lograr la reflexión de quienes nos dedicamos al servicio de la docencia.

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Karen es una estudiante de cuarto semestre de nivel preparatoria y los resultados de sus calificaciones  han venido de más a menos, al grado de que en el semestre anterior se  vio en la necesidad de presentar exámenes extraordinarios de matemáticas, física y química.

La profesora Efigenia es una maestra que ha mostrado en su trayectoria de más de 17 años de vida académica, constancia y dedicación. La profesora Efigenia imparte una materia del área de sociales de cuarto semestre, precisamente donde cursa Karen.

Durante el curso del semestre, Karen ha tenido un comportamiento errático: Falta periódicamente a clase y cuando asiste, constantemente es amonestada por la profesora Efigenia, debido a que conversa con otra compañera de nombre Patricia. Cierto día, al percatarse de ello, la profesora interrumpió la clase…

-      - Karen, ¡no es posible que nuevamente estés distraída… y peor aún, que estés distrayendo la atención de tus compañeros! ­

Vociferó acremente la profesora Efigenia y agregó más:

-        - ¡Como sigas así, vas tener problemas! ¡Te recuerdo que en el segundo examen obtuviste calificación reprobatoria…! ­

Karen, sintió el coraje por la manera en que fue reprendida antes sus compañeros. Sin bajar la mirada, se mantuvo en silencio por unos segundos y finalmente respondió:

-          - Maestra yo estaba comentando con mi compañera, respecto a lo que usted acaba de mencionar y…

La profesora, intuyendo la mentira, interrumpió a la alumna para aplicar un ejemplar correctivo..

-          - Mira Karen, si no te interesa la materia, es mejor que te retires ahora… ¡Así que tomas tus cosas y hazme el favor de salir ahora mismo!… ¡No quiero verte en mi clase hasta que vengas acompañada de tus padres…!

Karen sintiéndose contrariada no tuvo más remedio que salir del salón. Pasaron los días y la presencia de Karen, solo fue percibida  por su amiga Patricia…

2

Al terminar el semestre, el resultados de las calificaciones fueron publicadas. Como era de esperar, Karen no había acreditado la materia. Al enterarse, instintivamente buscó a la profesora Efigenia y  al encontrarla,  pidió desesperadamente hablar  con ella:

-          - Profesora… ¿me permite hablar con usted?  Quiero hablarle de mi situación… y he pensado que tal vez usted pueda ayudarme…mire es que yo tengo un serio problema…

Sin ningún miramiento y en tono por demás sarcástico, la profesora interrumpió a la joven Karen antes de concluir…

-          - ¡Ahora si estas preocupada...!  ¿por qué no acreditaste en mi materia? … yo te lo advertí en su momento… No venias regularmente a clases y cuando lo hacías…  solo era para estar platicando…. ¿Claro verdad?  ahora vienes a buscar ayuda… ¡pues yo no soy quien para regalar calificaciones…!  Así es que por favor… ¡Evítame la pena de decirte que no puedo atenderte…! ¿Si?... Lo mejor es que presentes el examen extraordinario…  o mejor aún, que  te presentes re cursar  la materia… ¿De acuerdo?

Considerando haber dado por terminada la conversación, la profesora Efigenia emprendió la marcha y se alejó… La joven Karen  quedó paralizada por la respuesta  de la profesora… Crispando las manos su semblante palideció…

3

Pasaron algunas semanas y al inicio del siguiente semestre, todo fue normal entre los alumnos del grupo. La profesora Efigenia como siempre, finalizaba su primera actividad frente al grupo, con los lineamientos de cómo habría de evaluarlos y  los objetivos académicos por alcanzar y las reglas. Preparada para salir del aula, intercepto a Patricia, la misma compañera de Karen, que re cursaba la materia.

-         - Patricia… ¿ya viste lo que deja no atender debidamente las clases…? por andar de platicadora ¿he?...  ahora estarás “muy satisfecha”…. Y  por cierto… ¿Qué me dices de tu compañera Karen?… no se presento hoy a clase… seguro va comenzar igual… inasistencias, poca atención,  incumplimiento en tareas, nula participación… ¡Qué sé yo!...

Patricia, bajo la cabeza y en tono apesadumbrado comentó:

-          - Profesora… ¿es que aún no está enterada verdad...?

-          - ¿De qué…?    Interrogó la profesora con una mirada expectante…

-          - De que mi amiga Karen… falleció… ¡se suicidó maestra… ¡

Detuvo sus palabras para sollozar. La maestra sorprendida pidió a Patricia que se calmara… que respirara hondamente y le precisará con mayor detalle semejante noticia que no daba crédito. Patricia haciendo un gran esfuerzo por seguir las indicaciones de la maestra, prosiguió su relato:

-       - ¡Karen tenía muchos problemas maestra… ¡ fíjese que ella se embarazó de un muchacho de sexto semestre, el cual se negó a apoyarla, argumentando que no era de él…. Sus padres que estaban separados, no quisieron respaldarla sino todo lo contrario… se incriminaron mutuamente…  y se generó un gran problema entre ellos… le dijeron que  era una desvergonzada… que si el esfuerzo que ellos hacían era para anduviera de loca en la escuela… acabaron por echarla de la casa…

Patricia busco en su bolso un pañuelo y continuó.

-          - ¡Maestra! ella  tenía problemas no solo con su materia, estaba por solicitar al Consejo Técnico  otra oportunidad para continuar sus estudios en la prepa… Todo esto me lo platicaba cuando usted le pidió que saliera de su clase… ¿Se acuerda maestra…?

Haciendo una breve pausa para enjugar sus lágrimas,  continuó el relato…

-       - Todo se le junto a la pobre Karen…  el desprecio del novio que tanto quería, la posibilidad de quedar fuera de la escuela, el embarazo de un hijo no deseado, la situación de estar sola…fuera de su casa.  En una decisión de arrebato y sin que nadie se diera cuenta… ¡tomo una gran dosis de barbitúricos!… ¡si maestra!… ¡se quitó la vida!

La joven Patricia soltó nuevamente el llanto y dio media vuelta para alejarse.  Impactada por la noticia,  profesora Efigenia cerró los ojos para recordar la imagen de Karen: El recuerdo vívido de la insistencia de Karen por hablar con ella, sería una imagen que etaria en su mente para el resto de su vida…

Fin